La Tecnología y la Conducta Humana @raulamiel

 

#MisNotasDomingueras.- Cerrando el mes de enero. Ya mañana es el primer día de febrero. Lleno de interesantes y variadas efemérides. Día la Candelaria, Día Mundial del Cáncer, Año Nuevo Chino, 4F, Día de la Juventud, San Valentín, Lunes y Martes de Carnaval, Miércoles de Ceniza, 27F. Será un placer navegar por la red para saber más de ellas, mientras estamos a la espera de mejor congresión del temazo del catalizador. Esta semana hubo acercamientos significativos. 

La tecnología no solo está cambiando la forma en que las personas interactúan con el mundo, también está cambiando la forma en que los científicos estudian el comportamiento humano y el cerebro. Las nuevas tecnologías están permitiendo a los científicos psicológicos sacar sus investigaciones del laboratorio y llevarlas a la "naturaleza", donde las teorías se pueden probar en entornos del mundo real.

El avance de la tecnología ha asegurado que juegue un papel vital en nuestras vidas. Lo usamos a lo largo de nuestro día en nuestra rutina diaria. "hola Google...", "hola Raúl..." ¿con qué frecuencia usamos estos comandos cuando necesitamos verificar algo rápidamente en nuestros teléfonos? Este fenómeno muestra nuestra dependencia de la tecnología que evoluciona día a día. Desde teléfonos inteligentes y relojes inteligentes hasta inteligencia artificial, la tecnología ha recorrido un largo camino. La tecnología ha cambiado todo el lugar de trabajo moderno.

La gente se ha inclinado tanto por la tecnología que incluso ahora, las empresas están desarrollando sus estrategias en torno a ella. La forma tradicional de interacción entre un vendedor y un comprador ha cambiado drásticamente con el establecimiento de la industria del comercio electrónico. Cuando vamos a un restaurante, primero tomamos una foto del plato para subirlo a nuestras redes sociales antes de probarlo. Lo mismo ocurre cuando viajamos. Intentamos capturar el momento en lugar de vivirlo. Esa es la extensión de la tecnología que se ha convertido en una parte integral de nuestras vidas. De alguna manera, nos estamos volviendo adictos. La adicción a los juegos entre los niños es un buen ejemplo de esto, y se refleja muy mal en sus calificaciones escolares.

Piensa en cómo Internet cambió nuestro comportamiento social. Ahora interactuamos más en llamadas telefónicas, correos electrónicos que han reemplazado la forma tradicional de reunirse cara a cara. No podemos ignorar el hecho de que el vínculo social que compartimos los humanos se ha visto afectado por los avances tecnológicos. Los momentos en que solíamos pasar el rato con nuestros amigos y familiares se han convertido en recuerdos. En cierto modo, estamos atrapados en una cueva digital de la que tenemos que salir y empezar a vivir en un entorno saludable.

Pero, ¿son estas las únicas formas en que la tecnología ha impactado nuestras vidas? La respuesta es NO.

Cada dos días escuchamos noticias falsas de una forma u otra. Las plataformas de redes sociales se han convertido en un punto de acceso para que estas personas difundan noticias falsas. Afecta a la sociedad en general. La gente tiende a creer más en esa información errónea que en seguir los medios impresos que proporcionan información genuina y verificada. El contenido disponible en los medios moldea la opinión de la sociedad. A veces trae un cambio en cómo nos comportamos con los demás y cómo los juzgamos. La gente necesita averiguar la fuente correcta de información. En muchas ocasiones, nos encontramos con una situación en la que comenzamos a comprar en línea una cosa pero terminamos comprando otra debido a un mejor descuento en el último artículo. Lo hacemos porque tememos perdernos la emocionante oferta de ese producto. De esta forma, las empresas de comercio electrónico manipulan el comportamiento del consumidor. Solo introspeccionen dentro de ustedes mismos, cuánto tiempo pasan en las aplicaciones de redes sociales o viendo una serie en una plataforma OTT. Así es como se está secuestrando el comportamiento de la gente. Necesitamos utilizar nuestro tiempo de manera eficiente.

A pesar de que los avances tecnológicos tienen importantes beneficios para nuestras vidas, las consecuencias que a menudo se pasan por alto dan miedo.

Ahora necesitamos tener siempre algo electrónico en nuestras manos: un dispositivo tecnológico que nos conecte a Internet. Estamos pasando por alto el mundo real y dedicamos una cantidad de tiempo sin precedentes a socializar, trabajar y pensar con computadoras.

Piensa en lo diferentes que serán los hijos de nuestros hijos de la generación de nuestros abuelos. Los niños ahora juegan con el Smartphone, incluso antes de que puedan hablar, ¿qué impacto tendrá eso en las sociedades venideras?

1. La pared digital

Un hogar, en el trabajo y fuera. Las personas ya no interactúan con las personas, sino que dependen principalmente de la tecnología para obtener conocimientos. Una respuesta común a una pregunta es "Google". Si bien puede resultar más eficaz buscar conocimientos en Internet, también tiene consecuencias. Con una interacción menos de persona a persona, estancamos nuestras habilidades sociales, también elimina las conversaciones abiertas, con otros, que conducen a nuestros momentos más creativos. La tecnología, en última instancia, ha cambiado para siempre nuestra recopilación de conocimientos, posiblemente para bien, pero no olvidemos el valor de la interacción cara a cara y las conversaciones sin objetivo.

2. Somos menos pacientes

La tecnología nos ha hecho a muchos de nosotros, mucho menos pacientes en más de un sentido. Con el mundo al alcance de la mano, queremos saber las respuestas de inmediato: ¿por qué esperar una conclusión, cuando podemos encontrarla con unos pocos toques y un deslizamiento? Desafortunadamente, esto puede darnos una expectativa de éxito poco realista. Tenemos una menor exposición a la espera de resultados y, como tal, podemos estar más inclinados que nunca a tomar atajos. Debemos ser conscientes de nosotros mismos y darnos cuenta de que rápido no siempre significa alta calidad.

3. Busque el botón Me gusta: sin conexión

La inclusión social es increíblemente importante para nosotros; solo mira la intensa popularidad de los sitios de redes sociales. Estamos constantemente enfocados en lo que piensan los demás y publicamos imágenes no para nosotros, sino para que otros las disfruten. Esto puede ser excelente para nuestros amigos globales y nuestra familia lejana, pero también puede tener consecuencias dañinas para nuestra autoestima. Cuando pasamos demasiado tiempo tratando de complacer a los demás, perdemos la pista de lo que realmente queremos o nos gusta.

4. No podemos concentrarnos

¿Alguna vez te preguntaste cuántos minutos de nuestro día perdemos porque estamos mirando nuestros teléfonos? Una aterradora encuesta citó recientemente que la persona promedio en USA. Por poner un ejemplo. Ahora pasa alrededor de 5 horas por día en dispositivos móviles. Eso es casi la mitad del día que pasan en su teléfono y, preocupantemente, la mayor parte de ese tiempo es fuera del horario laboral. ¿Piensas en toda la vida que se nos escapará? Necesitamos incorporar los momentos habituales sin teléfono, para que no dejemos que la vida se nos escape.

5. Menos consciente de la seguridad

Un pequeño pero importante cambio de comportamiento. En cualquier semáforo en rojo o incluso mientras conducimos, estamos más inclinados que nunca a revisar nuestros teléfonos móviles. De hecho, hemos llegado a un punto en el que colocaríamos nuestra obsesión por la tecnología por encima de nuestra salud y la salud de los demás. ¿Qué dices esto?

De esta manera, permitimos que la tecnología gobierne nuestro comportamiento, ya sea emocional, social o personal. Pero debemos apuntar a que se use de manera efectiva para mejorar la productividad en nuestra rutina diaria a largo plazo. Implica tenerla solo como un complemento de nuestras vidas en lugar de ser el controlador de ella. La vida esta en la calle, al aire libre, en charla con amigos y un buen café.

Y recuerda… Ciudadano en Acción. ¡Juntos es mejor!

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