El Martirio de Apolonia @raulamiel

#MisNotasDomingueras.-  Estoy casi seguro que a mis posibles lectores le ocurre esto de lo que hoy hago crónica. Aprovechando el flexible de esta semana, me fui a donde mi “Dentista” de Cabecera. Acostarse en el sillón de Rodolfo Bonassin no es solo la atención de un odontólogo. Es psicología y sociología, es filosofía, es situación país y política, es conversa a intervalos cuando el procedimiento lo permite. Siempre hay tema. 

Otro detallazo de las visitas a un consultorio odontológico. Es la colección de revistas de muy vieja data que encuentras en la sala de espera. La de Rodolfo no es la excepción.  La de hoy tenia de fecha el 31 de agosto del 2014. Ustedes conocen mi afición por las efemérides, las citas, la kabbalah, la numerologia y otros etc. a fines.  Pero será en otra ocasión que escribiremos de ello. En esa fecha. En Sentencia de la Corte IDH, Caso Hermanos Landaeta Mejías y otros Vs. Venezuela. Se halla  Responsabilidad de Venezuela por ejecución extrajudicial. De data de noviembre de 1996, ambos casos. Todo un hallazgo de orden esotérico que da para un tema sobre las coincidencias. Ya leerán porque.

Hoy el tema se dio por el arte en primera instancia. El Barroco. En un cuadrito que una paciente italiana le había obsequiado. Era “Santa Apolinara” A propósito de ser la Patrona de los Odontólogos y luego la aterradora historia de la mujer que apreciaba frente a mi. Extraño retrato, ella con un libro en una mano y en la otra sostiene una pinza con una muela. Pero de muy dulce mirar a estampa completa. Les confieso que no la conocía.



Por supuesto. La conversa me dio el tema de la vida de “Apolonia” (así es reconocida en todos los buscadores de Internet) y me entere que pertenece a esa clase de mártires cristianos primitivos que, cuando se enfrentaron a la elección entre renunciar a su fe o sufrir la muerte, abrazaron voluntariamente a esta última. 

Como "una virgen admirable en edad avanzada" convertida en un tema poco atractivo para los pintores, escritores y los afligidos, la imagen de Santa Apolonia se volvió más joven y más hermosa, y su historia cada vez más romantizada, a través de los tiempos.  Pero la cruda realidad de su historia  es ejemplo de vida.

Hacia mediados del siglo III d.C., Felipe el Árabe, o Felipe I, gobernó en el Imperio Romano. Eran tiempos en los que los cristianos eran perseguidos y torturados en todo el imperio, y también en su parte oriental, en lo que se llamó Alejandría.

 

En el curso de estas persecuciones, los soldados romanos capturaron a Apolonia, una anciana cristiana. A pesar de la tortura, se negó a renunciar a su fe cristiana, lo que provocó la ira de sus torturadores. Como resultado de los golpes, perdió varios dientes y los dientes restantes le fueron arrancados como tortura.



Su perseverancia en la defensa de la fe enfureció más a sus atacantes y la amenazaron con la hoguera, pero Apolonia no se desanimó.

Momentos antes del final pidió a sus torturadores que le soltaran las manos, haciéndoles pensar que iba a reconsiderar su decisión. Sin embargo, para sorpresa de los soldados, ella misma se arrojó al fuego para no renunciar a su religión. 

Apolonia, nacida alrededor del año 200 d. C., tiene fama de ser de ascendencia griega y la hija virgen de un magistrado pagano de Alejandría, Egipto. Muy estimada y admirada por los cristianos locales por su “castidad, devoción religiosa y obras de caridad”.

Los detalles de su tortura y sufrimiento fueron recordados vívidamente y relatados por aquellos que presenciaron el horrible evento. Unos cincuenta años más tarde, en el 300 d.C., antes de que el cristianismo se convirtiera en la religión oficial del Imperio Romano, fue canonizada como Santa Apolonia. 

Según relatos históricos, en el 248 d.C. los ciudadanos del Imperio Romano estaban particularmente ansiosos. Ese año marcó el milenio de Roma, habiendo transcurrido 1.000 años desde la legendaria fundación de la ciudad en 753 a. C. por Rómulo y Remo. Aunque los habitantes del Imperio apreciaron su esplendor y longevidad, existía un sentimiento de duda sobre su futuro. ¿Traerá el próximo milenio una estabilidad continua, o los disturbios políticos internos y las incursiones bárbaras en las fronteras traerán caos e incertidumbre? Durante las celebraciones milenarias, se dice que un poeta romano previó la catástrofe provocada por los cristianos. A pesar de los esfuerzos del emperador romano en el 247 d. C. para apaciguar a los dioses paganos ancestrales con sacrificios y asegurar la sucesión pacífica gobernando conjuntamente con su hijo, los dos murieron en batalla en el 249 d. C. y la inestabilidad comenzó a extenderse.

En ese mismo año, 249 d.C., la persecución de los cristianos por parte de la “población pagana” de Alejandría, Egipto, alcanzó una mayor intensidad, como se señala en una carta histórica intercambiada entre dos clérigos. La carta describe a una turba atacando y torturando a cinco cristianos, entre ellos Apolonia, que se negaron a glorificar a los ídolos romanos paganos o a denunciar a Dios.

Durante muchos siglos después de su muerte, no se escribió mucho sobre Santa Apolonia, pero en la antigüedad a medida que aumentaban las enfermedades dentales entre los habitantes de Europa occidental, su glorificación, contada al menos en seis relatos del incidente original, embellecidos de forma diferente, comenzó a extenderse. Entonces no se disponía de medios sofisticados de tratamiento o extracción dental, y los remedios caseros ofrecían poco alivio. Desesperados por aliviar su intenso dolor, los que sufrían de dolor de muelas comenzaron a suplicar al espíritu benévolo de Santa Apolonia por la intercesión divina. En reconocimiento a su importancia como benefactora sagrada que brinda consuelo a los afligidos dentales, se dedicaron en su nombre muchas iglesias, capillas, conventos y santuarios. Ha sido representada en pinturas artísticas, estatuas y tallas de madera, y venerada en imágenes de vidrieras de catedral, dramas religiosos y literatura desde la Edad Media. En varias áreas de Europa,

Hoy en día, como ya lo dije, Santa Apolonia es considerada la patrona de la odontología, y muchas sociedades, revistas y consultorios dentales han sido nombrados en su honor. Su asociación con la odontología es un hecho cumplido. Así que a cuidarse con una buena higiene bucal y visitar a tu Dentista de Cabecera periódicamente.

A otro tenor, me pregunto: ¿Traerá el futuro próximo alguna estabilidad al martirio actual que tanto dolor y sufrimiento padece la sociedad Venezolana? Me respondo:

-rre-los, construyendo tu futuro. 

En la Nueva República de la Venezuela Posible. 


Y recuerda… Ciudadano en Acción. ¡Juntos es Mejor!

 

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